miércoles, 8 de junio de 2016

Argentina y el subsidio a la paja


Por @sershus

Un argentino de 30 años tenía 18 cuando empezó el Kirchnerismo. Prácticamente consiguió su primer empleo en el Kirchnerismo, se fue s vivir solo durante el Kirchnerismo, se casó durante el Kirchnerismo y tal vez tuvo su primer hijo durante el Kirchnerismo. No conoce otra organización de la sociedad que no sea la de los valores Kirchneristas. Pero recuerda lo anterior: el desastre de 2001. Y le contaron lo anterior: el desastre del menemismo. Y le hablaron de alfonsin y el desastre de la hiper inflación. 

En realidad, no importa la edad que tengas, no hay referencia digna de la cual agarrarse, solo el mito de que a principios del siglo XX éramos primer mundo. 

Llegamos a hoy donde es necesario explicar cosas básicas para cualquier sociedad occidental: desde robar está mal, hasta el agua no es gratis. 

Parece increíble que la estrategia de defensa del Kirchnerismo (los inculpados y los defensores) sobre las evidencias de La Ruta del Dinero K sea "pero Calcaterra también robó". Se defienden diciendo que son chorros sin exclusividad. Es un avance respecto a la negación sobre los ilícitos hasta hace semanas pero es una tremenda tragedia social. Parece increíble pero no lo es en una sociedad acostumbrada al delito. 

Parece inscribe que luego de 700% de inflación se escandalicen con la lógica de que aumenten los servicios públicos  y que incluso luego de los aumentos siguen siendo regalados respecto a otros países de la región. Parece increíble pero no lo es porque nos acostumbramos en estos 12 años a un país totalmente subisidiado sin discrimar clase social de benefactor. 

Si entramos al detalle, es mucho más progre un sistema de tarifas "normales" con tarifas especiales para clases bajas que el subsidio generalizado que en definitiva se termina pagando con emisión, inflación y servicios de pésima calidad (como la luz, el gas y el transporte). 



Ni hablar del periodismo subsidiado con pauta y sus cientos de medios que no tenían consumidores. En un mundo donde cada vez se imprimen menos diarios, en Argentina surgía cada mes una más. Ahora hay que ser políticamente correcto y solidarizarse con los que quedaron sin trabajo que además fueron estafados por las mismas personas que ellos apoyaron desde sus plumas y a quienes hoy día exculpan. 
Mi solidaridad hacia con ellos. 

O un tema que conozco mejor: los subsidios al cine y la televisión. Desde el INCAA, INCATV, BACUA, AQUA Y miles de millones de pesos gastados para realizar series de todo tipo que en su mayoría jamás vieron aire. Nunca vi a un productor, realizador, eléctrico y lo que fuera, preocupado porque sus producciones subsidiadas por el estado luego no se estrenaran en ningún lado. No les llamaba la atención? No tengo yo el mismo derecho que ellos a que el estado me subsidie mi blog de viajes? (Pueden pasar: sershus.com). No hay diferencias, debí reclamar que me paguen para viajar y escribir más y viajar y volver a escribir. Encima hubiese tenido más visitas que espectadores de todas las series de INCATV sumadas. 
Como esas miles de series nunca vieron aire tampoco nunca tuvieron devolución y por lo tanto nadie les exigió nunca un mínimo de calidad y por lo tanto, en su mayoría, son impresentables. 

En definitiva, nos estuvieron subsidiando la paja y nos acostumbramos. 

El problema con el subsidio a la paja es que en un momento de acaba. Y se acaba mal. Venezuela es un ejemplo pornogáfico. 

Y los argentinos que tienen 30 no conociben una sociedad donde las cosas cuesten y donde la calidad se pague. Y los que tenemos más, nos mal acostumbramos. 

La tarea es titánica 

1 comentario:

  1. Absolutamente triste y real. Admiro tu facilidad para mostrarlo así de crudo y resumido. CHAU, me voy a llorar

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